#LordCubetas La ridícula gestión ciudadana de Juan Pablo Piña

¿Quién necesita comida o un trabajo digno cuando se tiene una cubeta y una escoba para barrer y trapear los pisos de tierra de las casas en las que viven?

Historias de un joven reportero

Por: Gerardo Ruiz / @GerardoRuizPue

 ¿Se imaginan a Juan Pablo Piña llegando a la casa de su mamá Patricia Kruczyn, una de las mujeres más preparadas del país, con una escoba para regalársela por el Día de las Madres?

¿Pueden recrear esta escena?

El diputado federal del PAN llegando al cumpleaños de su esposa Carmen Posadas, hija del controversial empresario Rafael Posada Cueto, con una cubeta azul con el logo de Acción Nacional y su nombre como regalo.

Yo tampoco.

Pues, este es el trato que el legislador panista por el Distrito III, de Teziutlán les da a las mujeres que votaron por él en el 2015 y que lo llevaron a la Cámara de Diputados.

Ver: #LordCubetas Reparte Juan Pablo Piña cubetas y escobas a las mujeres de Teziutlán

Al bautizado en redes sociales como #LordCubetas se le ocurrió la “brillante idea” que en pleno Siglo XXI las mujeres necesitan utensilios de limpieza para salir adelante y superar la pobreza en la que viven día a día.

¿Quién necesita comida o un trabajo digno cuando se tiene una cubeta y una escoba para barrer y trapear los pisos de tierra de las casas en las que viven?

No mamen.

Es más, Piña Kruczyn, quien es su vida había pasado más de una hora en la Sierra Nororiental hasta que por un capricho del ex gobernador Rafael Moreno Valle lo hizo diputado federal por esta demarcación, presumió su apoyo a las mujeres teziutecas a través de Facebook, Twitter y hasta boletinó su misógina gestión ciudadana.

“Como padre de familia, sé que una buena salud comienza en casa, con la limpieza de nuestro hogar, por eso estamos entregando paquetes que se componen de una cubeta, una escoba y una franela”, mencionó Juan Pablo Piña sin ninguna desfachatez.

Al mes, el ex priista y ahora neopanista, cuenta con 28 mil pesos para —como el resto de los 499 diputados federales­— para realizar gestiones ciudadanas en su Distrito. Si el chiste era comprobar los gastos, mejor hubiera organizado un curso para prevenir la violencia de género entre sus representadas, que mucha falta le hace a la entidad y no regalarles chingaderas que denigran su calidad de mujer.

Ojalá que los electores de Teziutlán y sus alrededores tengan memoria cuando Piña Kurczyn busque la candidatura al Senado por el PAN (si es que Moreno Valle lo deja luego de que lo traicionó el año pasado al votar en contra del presupuesto federal y venderse con Ricardo Anaya).

Entre ex candidatas priistas que los odian, alcaldes corruptos y diputados federales misóginos, no ven las suyas los pobres teziutecos.

Estos es otra muestra clara de la improvisación de políticos en Puebla.

Nos vemos en las urnas, dirían los pejezombies.