El Rincón del Troll
Por: @LaChef10
Esta semana, sí, escribo muy enojada. Los últimos acontecimientos, comentarios y acciones pendejas de hombres hacen que me hierva la sangre.
El día viernes en la mañana me encontré con varios tweets sobre gente de la UPAEP y del PAN respecto a la desaparición de Mara Castillo, una alumna de esta casa de estudios. De primera instancia no le tomaba importancia, pues dije: tal vez la señorita sigue en la fiesta, lo supuse por que es muy normal (si alguna de mis lectoras no lo ha hecho, lamento decirles que están perdiendo su tiempo, solo con mucho cuidado, plis), pensaba que era muy pronto para que ellos lo pusieran como una desaparición (lo digo por casos anteriores como el de “La Jennifer” y “El Brayan”, donde al final de la historia los muchachos solo estaban viviendo su amor).
Recordé la frase de mi mamá «ya regresará, ya regresará».
Al pasar el fin de semana, muchos panistas de hueso yunquista se sumaron al llamado, ya después de 72 horas. Era justo y necesario que se activarán los protocolos de busqueda, muchos portales y cuentas de Twitter hicieron el llamado a que la plataforma de Cabify, app que Mara solicitó para llegar a su casa, diera respuesta a las acciones de su chofer, quien se presume fue el último en verla con vida.
Pasaron algunos tweets hasta que la empresa encargada del servicio de transporte que había solicitado Mara para regresar a su casa, diera señales de vida.
Su respuesta fue grosera, déspota y sin sentimientos, intentando no hablar del tema y decir «yo ya le dije lo que sé a las personas que me pueden causar problemas, ustedes son simples y estúpidas personas que se quejan», obviamente, lo dijo con otras palabras, pero seguro que eso pensaban.
Surgieron miles de comentarios que si Mara fue la culpable, que los culpables son los papás por dejarla salir hasta tarde, que si los amigos fueron los culpables por dejar que se fuera sola; mil y una escusas diciendo que la chica de 19 años con el derecho y la obligación de vivir su vida fuera culpable de lo que le pasó.
También, me encontré con algunos que dicen que será la Paulette de Tony Gali y su caja china para desviar la atención sobre los temas de “El Cachetes” y sus amigos (historia que ya platicaba hace una semana en mi columna de El Incorrecto). A ellos les digo que no exageren, este tipo de actos y misterios no pueden taparse con otro tipo de chismes, pues la sed de justicia y de saber el paradero de Mara es muy importante.
Hasta el momento la historia del conductor de la empresa Cabify no cuadra y tampoco ayudan las cámaras de seguridad, donde claramente se ve que Mara nunca baja del vehículo, lo que nos lleva a preguntarnos ¿qué pasó con Mara?
El martes fue detenido el conductor de este vehículo cerca de Tlaxcala, no se dan de detalles si se daba a la fuga o qué hacia, el miércoles salió su abogado, que sin ser grosera, no le veo mucho colmillo para poder ayudar al acusado. En sus declaraciones, el chofer cuenta que la empresa Cabify se ha deslindado de todo y que no ha buscado a la familia para apoyarlos.
Durante todo este duro proceso salieron muchas declaraciones tal y como la de un estúpido rector de una de las universidades privadas de importancia del estado. El rector es Job César Romero Reyes, de la UMAD, quien olvidó lo sucedido hace unos meses con una de sus alumnas, víctima de un feminicidio, dijo que las mujeres tienen la culpa de lo que les pasa todo por su libertinaje.
En verdad, señor, me daría pena estudiar en una universidad cuyo encargado piensa que las mujeres deben ser sumisas. Espero y las alumnas así como los padres de familia muestren su descontento y este tipejo deje el cargo.
Otro de los personajes que me indignó fue un tal periodista Marco de Núñez (no se sientan mal si no lo conocen, yo por desgracia alguna vez lo escuché y lo vi publicando fotos privadas de una policía de San Pedro Cholula con tal de seguir con el amarillismo de su programa, su enojo de que le reclamará lo llevo a la niñería de bloquearme). Este señor en su portal llamado Así Lo Dice Puebla, había entrevistado a Juan Carlos Lastiri con lo que se había ganado una lanita, que se fue a gastar a un table dance o algo por el estilo.
El señor, que tanto dice pelear por acabar con la trata de personas y esas cosas, decidió de la manera más inteligente tomar fotos de la mujer que lo acompañaba y subirlas a Facebook como si fuera un premio. Indignado dio las gracias por meternos en su vida y su amigüita Violeta Lagunes, a la que sigo sin entender cómo se queja de la trata, aplaude que el señor se vaya a estos lugares, donde no sé sabe si las mujeres que están trabajando ahí están por gusto o contra su volunta.
La panista sigue sin decirle nada a su amiguito sobre sus acciones. Digo, cada quien es libre de gastar en lo que guste, pero para que pelan por algo que aplaude y hasta fomentan.
Sin más que decir, mis lectores, los espero la próxima semana.
XOXO.
Para dudas, aclaraciones, contrataciones y acoso laboral, me pueden seguir en @LaChef10 o mándenme un correo a lac[email protected] y con gusto les paso algunas de mis recetas.
