El silencio de los principales liderazgos del panismo en torno al amparo que la lideresa estatal del partido, Genoveva Huerta, tramitó para evitar la cárcel por ser una de las cómplices y beneficiarias de la Estructura Maya con la que Eukid Castañón desvío cientos de millones de pesos durante el oscuro régimen morenovallista, es muy incómodo, por decir lo menos